Me acaban de confirmar mi presencia en el Coloquio de Estudiantes de Literatura PUCP. Tendré un espacito para hablar abiertamente sobre el olvidad y enterrado Clemente Palma. Opacado por la inmensa sombra de su padre, el celebérrimo tradicionista y viejito bigotón don Ricardo Palma. Ignorado por escribir cuentos fantásticos en un país de gloriosa tradición realista. Rechazado por toda persona de cordura y sanos valores burgueses por proclamar ser malévolo. Vituperado por pelearse con el máximo poeta peruano, César Vallejo. En fin, un cadáver más en la fosa común, el pozo del olvido. Cierto es que hay tantos otros incluso más abajo, opacados por el ya opacado Clemente, por ahí van Jose Antonio Román, el doble de brillante y doble de desconocido.
El hecho es que me daré un escape de las instituciones más católicas hacia otra que paradójicamente se llama la Universidad Católica pero nunca ha sido muy insistente en el tema, por lo que podré hablar de la malevolencia de Clemente y, de paso (aunque quizás mucho más) de su técnica literaria. La presentación será el día 12 de noviembre a las 5pm, en la sala de grados de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas (pabellón H).
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2 comentarios:
(Piiiiiip...)
Bueno, es que Don Clemente no se hacía querer mucho. Recuérdese solamente su tesis, una radical apología del racismo. Es, creo, muy probable que por estas actitudes se haya visto opacada toda su obra -no sé si tanto por la figura de su padre, pues Clemente, aunque polémico, tenía su reconocmiento en el medio intelectual.
muy interesante, Glauconar. Ire a verte. Saludos.
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